Tío Grillo

Tío Grillo

Objectives

As a result of this lesson, students will be able to:

· identify and use vocabulary related to the house and daily-life activities.

· describe characteristics of characters (based on pictures).

  • describe house and grounds (based on pictures).
  • restate proverb in other words.

Materials
  • Student Handout: Tío Grillo
  • Vocabulary
    chancha (common Nicaraguan word for pig)
    sajurín (sabio) robar el grillo
    anillo costoso las criadas
    el palacio adivinar la habitación
    la alfombra los muebles la cama
    faltarse el baño la bañera
    la ladrona el comedor la biblioteca
    el estanque el jardín la prueba
    el rabo atrapado desconocido

· Pictures related to the story. (Pictures in the story text can be enlarged on separate pieces of paper.)

  • Proverb: “Aquí sí que torció la chancha el rabo.”

Pre-story Activities

1. Complete activities from standard curriculum related to house and daily activities.

2. Display pictures of characters from the story. Have students describe them in Spanish.

3. Display pictures of a palace and rooms of a house. Have students describe them in Spanish.

4. Have students list activities they do in the different rooms.

5. Explain the proverb, “Aquí sí que torció la chancha el rabo.” Have students restate it in other words.


 

Post-story Activities

1. Set the scene for the storytelling by putting pictures of rooms of the palace on the board. Have the character pictures nearby. (Use a storyteller’s tradition: Light a candle to indicate that the story is beginning and blow it out at the end. Students are asked to suspend disbelief while the candle is lit.)

2. Tell the story in Spanish, involving the students where possible.

a. Students can demonstrate emotions of characters through pantomime.

b. Students can also repeat key phrases such as “Ya vi el primero, me faltan dos.”

c. Often after a storytelling session, students want to ask questions. Whether they ask in English or Spanish, answer in Spanish.

3. Ask comprehension questions.

a. Begin with simple yes/no questions. Then describe a scene in 1-2 sentences having students indicate whether it is the beginning, middle, or end of the story.

b. Ask (who, what, where, when, why, how) questions that they must answer with sentences.

4. Have students draw their favorite scene from the story. (This might be a good homework assignment.)

a. Display the pictures they have drawn. Have students describe what they see and the action in that part of the story.

b. Put 5 of the pictures they drew up on the board and ask students to sequence them telling that is happening in each. Then, while students aren’t looking, remove one picture and ask them to describe which one is missing.

c. Pick one of the pictures that the students can’t see and play “20 questions.” (They must ask questions that can be answered yes or no. They have 20, or fewer, attempts to guess which picture you are holding.)

5. Prepare a closing activity.

a. Give the students a paragraph or two from the story with words left out. They must fill in the missing words.

b. As a class, or in small groups, have the students rewrite the story (or a scene, depending on how much detail you’d like and the students’ level of Spanish).

c. Have students act out scenes or the whole story.

d. In English or Spanish (depending on students’ level) ask them to compare this story to others they have read or heard.



Tío Grillo, el Sajurín

un cuento de Nicaragua

Un rey perdió su anillo costoso. Sus tres criadas lo robaron, pero él no lo sabía. Ellas se lo hicieron tragar a un pez grande en el estanque del jardín.

El rey llama a los sajurines del reino. Quiere que alquien adivine el lugar de su anillo precioso. Dice que el voluntario puede vivir en el palacio por tres días comiendo y bebiendo como un rey. Pero, si, después de esos días, no encuentra el anillo, le cortaría la cabeza.

Ningún sajurín quiere el trabajo. ¡Los sajurines no quieren perder sus cabezas! Tienen miedo y no están seguros que puedan descurir el anillo.

En la ciudad, vivía un viejito, quien por ser muy contrahecho lo apodan el Tío Grillo. Cuando oye el anuncio del rey, piensa, “A mí, me gustaría pasar tres días en el palacio real. Puedo comer como el rey. Puedo beber como el rey. No puedo adivinar el lugar del anillo. Pero, mi vida es tan miserable; no me importa morir después de los tres días. Si me quedo aquí, puedo morir de hambre.”

Dicho y hecho. Tío Grillo se presenta como sajurín al Rey. El Rey no está seguro que Tío Grillo sea inteligente, pero lo aceptá. Dice, “Trato es trato. Debes descubrir mi anillo en tres día o te cortare la cabeza.”

Una criada lleva a Tío Grillo hasta una habitación. ¡Es fantastica! Tiene una cama gigante. La alfombra es muy gruesa. Los muebles son muy elegantes. La criada le trae una comida como si fuera el rey. Antes de meterse en la cama, Tío Grillo piensa en los tres últimos días de su vida y se dice, “Ya vi el primero, me faltan dos.”

La criada lo oye. Ella piensa que el sabe su secreto, que ella es uno de los ladrones del anillo. En seguida va a hablar cons sus acómplices. Otra criada acepta atender al Tío Grillo el día siguiente.

Ese día siguiente, Tío Grillo está contento. Come tres comidas ricas y excelentes. En la noche, entra en el baño para lavarse en el bañera enorme. La lleva con agua caliente y jabón de oler. Se descansa en el agua y dice a sí mismo, “Ya vi dos. Me falta uno.” Tío Grillo quiere decir que sólo un día le resta de vida. Pero la criada lo oye y ella piensa que quiere decir que él sabe que ella también es ladrona.

La segunda criada corre y habla con las cómplices. Tienen miedo.


 

El tercer día la tecera criada sirve a Tío Grillo. Los dos están en el comedor. La mesa elegante está llena de comida rica. Después de comer, Tío Grillo, despidiéndose de la vida mortal, dice, “Y vi los tres.” La tercera criada, como sus amigas los otros días, piensa que él conoce su secreto. Cae de rodillos y dice, “Nosotros somos los ladrones. Por favor, no nos denuncie.” La criada explica a Tío Grillo el lugar donde está anillo.

En la mañana, el rey está sentado en la biblioteca del palicio. Hay estantes de libros en todos lados. Desde las ventanas se pueden ver jardines con flores y plantas del mundo (y el estanque). Tío Grillo entra. Le dice al rey que el anillo costoso está dentro del pez del estanque. Todavía, el rey no puede creer que Tío Grillo sea un verdadero sajurín. Le hizo otra prueba. La cocinera destazó el rabo de una chancha y lo enterró en el jardín. Cubrió el entierro con flores. El rey dice a Tío Grillo, “¿Qué hay enterrado aquí?”

El tío está perplejo y preocupado. Exclama, “Aquí sí que torció la chancha el rabo.” (Es el refrán que se usa cuando uno tiene razón con algún caso, pero se erra en otra.)

El rey, sorprendido, dice, “Tienes razón, es rabo de chancha en ese entierro.” Sin embargo, el rey no cree que el Tío sea sajurín. Tiene una última prueba de sorpresa. Cuando el Tío no mira, el rey coge un grillo del jardín. Lo pone en su puño de la mano derecha. Pregunta al sajurín, “¿Qué tengo aquí en la mano?”

El Tío no sabe. Piensa algunos momentos. Acepta que el rey conoce la verdad y va a morir. Desesperado, se dice, “¡Ah, Tío Grillo, estás atrapado!”

El rey, que no sabe el nombre del Tío, piensa que es, realmente, un sajurín. Le da a Tío Grillo mucho dinero y honores. El Tío no quiere pasar otras pruebas. Se esconde en un pueblo desconocido lejos del palacio.

Este cuento prueba de que cuando una persona está de buena suerte, todo le resulta bien por la bondad de Dios. Al contraio, cuando una persona está de mala suerte, todo le sale al revés, por la maldad del diablo que mete su cola.